Antigua Base militar de Gadi

Colonos Israelíes están estableciendo una nueva colonia en el Valle del Jordán. Con el apoyo del primer ministro israelí, Netanyahu, se están apoderando de la antigua base militar de Gadi, ubicada cerca de dos comunidades palestinas, y están reclamando las tierras para ellos mismos, al igual que hicieron los colonos del asentamiento de Maskiyot en 2002.

En las últimas semanas los contratistas de los colonos han comenzado a renovar los edificios de la base militar en desuso de Gadi, en la zona de Abu Al Ajaj, en el corazón del Valle del Jordán. Estos nuevos colonos están claramente trabajando en estrecha colaboración con el asentamiento ‘Jordan Consejo Regional del Valle’ y el asentamiento vecino de Massu’a para apoderarse de las tierras. Esta última es una de las colonias más agresivas en el valle del Jordán. Los colonos de Massu’a se han apoderado violentamente de las tierras de Abu Al Ajaj en tres ocasiones en los últimos años.

El establecimiento de un nuevo asentamiento fue anunciado en la radio del ejército israelí el 10 de marzo de 2011, cuando Netanyahu visitó la base Gadi. En aquel momento Alhiani David, jefe del Consejo Regional del Valle del Jordán, dijo: «Ni el ministro de Defensa ni el primer ministro van a construir un nuevo asentamiento en el Valle del Jordán, no ahora. Tal vez más tarde, cuando tengan la soberanía del Valle». Israel no tiene más soberanía en el Valle del Jordán de lo que tenía hace un año, por lo que su ocupación es tan ilegal como lo era antes. Pero sus intentos de apoderarse del valle se han vuelto más agresivos y evidentes. Así, en septiembre de 2011 se dio a conocer la noticia sobre los planes de Israel para embarcarse en la eliminación sistemática de 27.000 beduinos en Jerusalén Este, el Valle del Jordán y el resto de la zona C.

El nuevo asentamiento estará dirigido por el israelí Bnei Hamoshavim, miembro de una organización juvenil. Esta organización alentará a los jóvenes israelíes que experimenten problemas de salud mental o adicciones a participar en el proyecto de colonización del Valle del Jordán instalándose aquí.

Mezquita rodeada por las vallas de la Base IOF

Antes de la ocupación israelí de Cisjordania en 1967, la base militar de Gadi fue utilizada por el ejército jordano y alrededor de 10.000 palestinos vivían al sur y al este de Abu Al Ajaj, en un campo de refugiados. Lo que queda del campo de refugiados hoy día son el cementerio y la escuela de la UNRWA. La mezquita sigue en pie en la colina, dentro de la valla que rodea la nueva base IOF (Fuerzas de Ocupación Israelí), a la que los palestinos han tenido prohibido su acceso durante los últimos 45 años.

Desde que el campamento de refugiados fue destruido poco después de la ocupación, la comunidad palestina de Abu Al Ajaj se ha ganado la vida con la agricultura de la poca tierra que tenían y el pasto de sus ovejas en las laderas de las montañas. Hay unas 120 familias que ahora viven en la comunidad, algunos originarios de la zona de Al Jiftlik y otros que llegaron como refugiados de Yata, cerca de Hebrón, cuando estos fueron expulsados ​​por los colonos.

En los últimos ocho años, los colonos del cercano asentamiento Massu’a han trabajado mano a mano con la IOF para sacar a los palestinos de estas tierras. En tres ocasiones (en 2004, 2008 y 2010)Puerta de acceso al Asentamiento de Massua se ha seleccionado un área de terreno que ellos querían, se derribaron los edificios palestinos o posesiones que estaban allí y tomaron la tierra para su propio uso. Se erigieron invernaderos para cultivar uvas en 2004, tomaron un campo para sus cultivos en 2008, y en 2010 atacaron de nuevo a los palestinos locales para expropiarles más tierras y levantar otra hilera de invernaderos. *Véase Informe de la ONU: OCHA Humanitaria. En cada ocasión, la IOF estuvo a su lado respaldándolos. Durante el mismo período, la comunidad ha recibido innumerables órdenes de demoliciones, muchas de las cuales se llevaron a cabo destrozando sus casas y sus establos. Además, se han visto sometidos a constantes asaltos por parte de los colonos ilegales de Massu’a, que entraban en la comunidad para aterrorizarlos con insultos y agresiones físicas.

En la actualidad, alrededor de 30 casas tienen ya órdenes de demolición sin razón justificada. Las familias de esta zona viven con el temor de que cualquier día la IOF llegue y destroce su hogar y su medio de vida. Otros agricultores locales también han sido hostigados por la IOF. Waleed Abu Hania, que vive cerca del cementerio, ha sido expulsado de su finca en tres ocasiones por la IOF, cada vez que ha intentado reclamar que está utilizando tierras del Estado palestino. Un poco más arriba de la carretera, la familia Saaidh, ha recibido una orden de demolición para el contenedor de metal en sus tierras de cultivo. La pequeña comunidad cerca de Koursiliyya, compuesta por cuatro familias, es aún más vulnerable. Ubicada al oeste de la base militar de Gadi, ya les ha sido prohibido el acceso al agua de un pequeño manantial cercano y se encuentran bajo amenaza de traslado forzoso.

Todas estas familias palestinas están persistiendo para continuar viviendo en sus tierras. Están demostrando una tenacidad increíble, aunque tampoco tienen otro lugar a donde ir. Esta es su casa. Viven constantemente enfrentados al gran esfuerzo de resistir en sus tierras contra el acoso del Estado de Israel, que pretende sacarlos a la fuerza. Ahora se enfrentan a la perspectiva de otro nuevo grupo de colonos jóvenes, dada la impunidad que les ofrece su gobierno a utilizar la violencia, la agresión y el hostigamiento en contra de sus vecinos palestinos.